Chapter 727 Capítulo 1902 Ineta apenas había logrado conseguirle esa oportunidad. ¡Así que su hermana tenía que hacer un buen papel en la cama del Sr. Walter! Cuando Inés volvió a casa, ya era medianoche. Apenas entró por la puerta, Cecilia bajó de las escaleras: “Ine, ¿por qué regresas tan tarde, dónde has estado?” “Hoy tuve una cena con el equipo de la obra,” se lamentó Inés, fingiendo un dolor de cabeza, “¡Ay, Cecilia, no tienes idea de lo dificil que es conseguir un papel!” Al ver a Inés tan afligida, Cecilia sintió compasión: “Ine, has trabajado muy duro, mejor ve a tu habitación a descansar.” “De acuerdo,” La chica se sujetaba la cabeza mientras caminaba hacia su cuarto. En ese momento. Marisol estaba pasando por una experiencia que jamás había tenido, sentía incomodidad en todo el cuerpo y solo encontraba alivio cuando tocaba la piel del hombre. Ella abrazaba su cuerpo, respondiendo con timidez a sus besos. Entre la penumbra, escuchó al hombre murmurar cerca de su oído dos palabras: “Rita.” ¿Rita? ¿Quién era Rita? Al día siguiente. El hombre se despertó sobresaltado, con un dolor de cabeza insoportable, al darse cuenta de que estaba desnudo, sintió que algo iba mal. Al voltear, vio a Marisol, que todavía estaba dormida a su lado. ¿Quién era esa mujer? Leonardo recordó rápidamente lo que había sucedido la noche anterior y sintió repulsión por la mujer que tenía a su lado. Como el Presidente del Grupo Ibarra, muchas mujeres querían acercarse a él, utilizando todo tipo de trucos Leonardo siempre había sido un hombre integro y nunca se involucraba con esas mujeres, ¡pero el día anterior había perdido la razón y había tenido ese accidente! Habia asistido a una reunión de negocios y después de beber unos cuantos tragos, sus subordinados lo ayudaron a llevarlo a un hotel para descansar durante la noche. ¡Resulta que esa mujer había aprovechado la oportunidad para acercársele! Leonardo miraba fríamente a Marisol, sin encontrar en ella diferencia alguna con las mujeres que se vendian por fama y fortuna. En ese momento, las pestañas de la chica temblaron y abrió los ojos, despertando Al recobrar la conciencia y ver al desconocido frente a ella, se asusto, además, al notar que estaba desnuda, rápidamente tiró de la cobija para cubrirse y empezó a gritar: “¡Ay! ¿Quien eres tú? ¿Por qué estás en mi habitación?” Leonardo frunció el ceño, “Mira bien, jesta es mi habitación!” Marisol se vio obligada a calmarse y al mirar a su alrededor, poco a poco recordó lo que había pasado: “Esta, ¿no es la habitación que mi hermana reservó? ¿Cómo, cómo entraste?” Mientras hablaba, se envolvió en la cobija y saltó de la cama con precaución. Sin querer, vio una mancha roja en la cama y sintió un dolor punzante en la cabeza. Search the FindNovel.ηet website on Google to access chapters of novels early and in the highest quality.